martes, 16 de febrero de 2016

Txapel gogoan zaitugu



Un día como hoy, un 16 de febrero de 1984 caía asesinado por las fuerzas represivas el portugalujo Iñaki Ojeda Martín de Butrón.

Iñaki Ojeda, Txapel, nació en el seno de una familia obrera. Cursó estudios profesionales en la escuela de Ortuella, donde empezó a formarse políticamente y a acudir a sus primeras manifestaciones y protestas con motivo de la Semana Pro-Amnistía de 1977. Mas tarde comenzó a militar en la organización juvenil Jarrai, y luego creó un grupo de apoyo a ETA junto a otros jóvenes. Este grupo realizó numerosos sabotajes contra la empresa Iberduero en protesta por la construcción de la central nuclear de Lemoiz. Tantos sabotajes hicieron que llamaron la atención no solo de la policía, sino de la propia organización ETA, que envió cartas a los voluntarios de la zona para preguntar acerca de quienes estaban realizando los sabotajes.

La policía detuvo a Txapel en Irun junto con otros dos compañeros cuando se dirigía a una cita con dirigentes de ETA. Tras ser torturado y juzgado, fue condenado a seis años de cárcel. En prisión desarrolló su pasión por la literatura. Escribió diversos libros de poesía y cuentos basados todos ellos en sus propias experiencias dentro de la cárcel. Por desgracia una buena parte de su obra se ha perdido ya que fue robada por los carceleros de la prisión de Puerto de Santa Maria. Tenia fama de serio y de solitario, pero era su forma de reflexionar y de analizar las situaciones. Realmente era muy abierto en su relación con las personas e incluso en las situaciones mas difíciles acertaba con la respuesta adecuada.

Txapel fue puesto en libertad en junio de 1983. Integrado ya en ETA pronto volvería a la clandestinidad. Era un voluntario muy observador y siempre estaba alerta de los movimientos que se producían en su entorno. El 16 de febrero de 1984 la policía consiguió localizar, después de registrar el barrio en que se encontraban, el piso en que se escondían Txapel y dos compañeros. Tras un primer tiroteo los dos compañeros de Txapel quedaron gravemente heridos. Cercado en una habitación y con los compañeros heridos, Txapel negoció su entrega a la policía. Le dijeron que saliese desarmado y se colocara contra una pared. Cuando lo hizo, fue literalmente fusilado por los GEOS. Los dos compañeros fueron arrastrados a la cocina de la casa. Un policía de paisano se acercó a Txapel y le disparó seis veces en el pecho. Cuando le hicieron la autopsia presentaba diecinueve impactos de bala en su cuerpo.


TXAPEL GOGOAN ZAITUGU!!!

sábado, 13 de febrero de 2016

La tortura es un viaje moral sin retorno


La tortura es un viaje moral sin retorno. No cabe atravesar esa frontera con pretensiones de excepcionalidad, porque la tortura degrada irreparablemente el código moral de quien la aplica materialmente, de los responsables que la autorizan y de la sociedad que la acepta, explícita o implícitamente.


Aceptar la tortura en "algunos casos como mal menor" es, de hecho, admitirla siempre. Porque, ¿en función de qué criterio se acepta? En el del bien superior, obviamente. Se trata de hacer un mal menor para obtener un bien superior. Pero ésa no es la excepción, sino la norma principal de la tortura.


Quienes torturan, casi siempre creen que lo hacen para conseguir algo que es bueno para la colectividad: aclarar un crimen, encontrar un arsenal, desarticular un grupo terrorista etc pero la sociedad que acepta la tortura como excepción deja la determinación de la excepcionalidad en manos de los torturadores y sus jefes. Habrán de ser ellos –¿quién, si no?– los que decidan, según su jerarquía de criterios, que tal o cual caso es lo suficientemente grave como para tirar para adelante apoyándose en ese respaldo social. Por eso, avalar la tortura en algún caso equivale a avalarla en cualquiera.


La tortura pone en marcha una reacción en cadena. Y el último de sus efectos –el más terrible de ellos– es el envilecimiento de la sociedad que la tolera en silencio. La española es una sociedad éticamente envilecida, en la que las personas con principios resultan tan incómodas y desazonantes como los asuntos que se empeñan en airear.


Denunciar la tortura es, en último término, denunciar la hipocresía dominante. Las buenas conciencias que son el lubricante ideológico del orden social. Porque la tortura no es una disfunción del sistema, sino una de los muchas y variadas armas que tiene para defenderse.


Fuente: "Tortura y doble moral" de Javier Ortiz

viernes, 5 de febrero de 2016

Angela Davis: Mujer, negra y revolucionaria


Angela Davis, hija de un mecánico de coches y una profesora de escuela, nació en Birmingham, Alabama, el 26 de enero de 1944. El lugar donde vivía la familia era llamado "Dynamite Hill" (Colina Dinamita) por el gran número de casas de afroamericanos asaltadas por el Ku Klux Klan. Su madre tambien fue activista a favor de los derechos civiles y había estado activa en el NAACP, antes de que dicha organización fuera proscrita en Birmingham. Davis asistió a escuelas segregadas en Birmingham. 


Cuando tenía 14 años se benefició de un programa de una organización religiosa progresista que permitía a estudiantes afroamericanos del sur ir a estudiar a escuelas del norte. Angela Davis pudo de esta manera ir a Nueva York y asistir a una escuela progresista en Greenwich Village, donde varios de los profesores estaban en la lista negra durante la terrible "caza de brujas" hoover-macarthista. Este ambiente radical le permitió introducirse en el estudio del socialismo. 


En 1961 Davis se matriculó en la Universidad Brandeis en Boston, Massachusetts, para estudiar francés. En el verano de 1962 ella viajó por primera vez a Europa, para participar en el VIII Festival Mundial de la Juventud cebrado en Helsinki, Finlandia. Allí puso conocer a otros jovenes con ideas revolucionarias parecidas a las suyas e intercambiar experiencias. 


La carrera incluía un año en La Sorbona, en París. Poco después de volver a los Estados Unidos pudo acordarse de la lucha por los derechos civiles que se estaba llevando a cabo en su ciudad natal cuando cuatro muchachas que conocía fueron asesinadas en la explosión de la Iglesia Baptista de Birmingham, en setiembre de 1963, un hecho que marcaría decisivamente su manera de pensar y su trayectoria posterior. 


Después de graduarse en la Universidad Brandeis en 1965 con resultados sobresalientes, pasó dos años en Alemania, en la facultad de filosofía de la Universidad Frankfurt. Allí realizo numerosas actividades pese a que le resultaba complicado el idioma alemán, y asistió a clases de Adorno y otros importantes pensadores socialistas de la llamada Escuela Crítica de Frankfurt. Tambien entró en contanto con los movimientos juveniles, como la Liga de Estudiantes Socialistas (SDS).  


Sin embargo los acontecimientos se estaban precipitando en Estados Unidos, con el movimiento de derechos civiles, el surgimiento del partido de las Panteras Negras, y las protestas contra la Guerra de Vietnam, así que regreso en 1967 a su país. Se instaló en San Diego, y siguió estudiando filosofía en la Universidad de California donde en ese momento estaba trabajando Herbert Marcuse. Davis recibió una gran influencia de Marcuse, especialmente su idea de que era un deber del individuo rebelarse en contra del sistema. Marcuse está considerado el "padre espiritual" del Mayo del 68 francés.  


En 1967 Davis se unió al Comité Coordinador Estudiantil NoViolento (SNCC) y al Partido de los Panteras Negras, y en 1968 también se involucró con el Partido Comunista Estadunidense.  En 1969 realizó un viaje a Cuba, donde pudo comprobar hasta que punto la propaganda imperialista había distorsionado los logros de la Revolución. Es Cuba, donde el racismo había sido erradicado, se convenció de que la lucha contra el racismo y a favor del socialismo eran algo inseparable.  


Angela Davis empezó a trabajar a finales de los 60 como profesora de filosofía en la Universidad de California. Cuando en 1969, el FBI (que aun estaba dirigido por el abiertamente fascista Edgar Hoover) informó a las autoridades de California (donde el gobernador era otro fascista, Ronald Reagan) de que ella era miembro del Partido Comunista Estadunidense, rescindieron su contrato. Esta suspensión levantó grandes protestas en la comunidad universitaria por lo que tenía de represiva, ilegal e injusta.


Davis participó en la campaña para mejorar las condiciones en las cárceles. Se interesó especialmente en el caso de George Jackson y W.L. Nolan, dos afroamericanos que establecieron una sucursal de las Panteras Negras mientras estaban en la prisión Soledad en California. El 13 de enero de 1970, W.L. Nolan y otros dos prisioneros negros fueron asesinados por uno de los carceleros. Unos días después el Jurado del Condado de Monterrey determinó que el guarda había cometido un "homicidio justificable".


Cuando poco después, un guarda fue encontrado asesinado, George Jackson y otros dos prisioneros, John Cluchette y Fleeta Drumgo, fueron acusados de su muerte. Se argumentó que buscaban vengarse de la muerte de su amigo W.L. Nolan.  El 7 de agosto de 1970, el hermano de George Jackson (1), Jonathan, de 17 años, irrumpió en la corte del Condado Marin acampañado de otros dos jovenes armados con ametralladoras y tras tomar como rehenes al juez Harold Haley y a otras personas, demandó que George Jackson, John Cluchette y Fleeta Drumgo fueran liberados. El conflicto acabo de forma sangrienta con un tiroteo con la policía en el que acabaron muertos dos de los tres asaltantes entre ellos Jonathan, así como el juez Haley, además de resultar varias personas más heridas.


Aunque Angela Davis no estuvo en el lugar de los hechos, la policía dijo que las armas usadas por Jonathan durante el asalto estaban registradas a su nombre, por lo que orderaron su inmediata detención.


Entonces Davis se dio a la fuga y el FBI la nombró como una de las "criminales más buscadas". Fue arrestada dos meses después en un motel neoyorquino, y la metieron en la carcel, primero en Nueva York y más tarde la trasladaron a California donde debía resolverse su caso. Durante el tiempo que permaneció en prisión ella no dejo su activismo político y de luchar por mejorar las condiciones de los presos. En 1971, estando en la carcel, se publicó su libro "If They Come in the Morning".


El encarcelamiento de Angela Davis proporcionó una oportunidad historica para movilizar a los progresistas americanos y de todo el mundo pidiendo su libertad, y la campaña "FREE ANGELA" fue uno de los episodios más importantes de los movimientos de protesta en la primera mitad de los 70.  


Como resultado de esta presión en febrero de 1972 se permitió a Angela Davis salir de la carcel en espera del juicio. El juicio se celebró poco despues y concluyo el 4 de junio con un veredicto de inocencia, siendo absuelta de todos los cargos. Había estado 16 meses en la cárcel.


Aunque Reagan pretendía que nunca volviera a dar clases, la movilización y la presión popular forzaron el cambio de actitud y permitieron a Angela Davis retornar a la Universidad de California y seguir dando clases con normalidad.  Davis también trabajó como conferenciante de estudios afroamericanos en el Claremont College de 1975 a 1977.    

  

En 1979 visitó la Unión Soviética donde fue recibida con entusiasmo y recibió el Premio Lenin de la Paz. Además fue nombrada profesora honoraria en la Universidad de Moscú.


En 1980 y 1984, Davis fue candidata a la vicepresidencia de Estados Unidos por el Partido Comunista.


Hoy en día Angela Davis continua su labor a favor de los colectivos discriminados y de los pobres del mundo, tambien en el movimiento pacifista en contra de la guerra de Iraq y de la política imperalista de su país, y viaja por el mundo hablándo a la gente de las atrocidades que comete día a día el gobierno de los Estados Unidos y de los crímenes de la globalización.


Tambien se ha implicado en la defensa de los presos políticos en las carceles americanas, como Mumia Abu-Jamal, a cuyo nombre recogio en 2005 el título de "Ciudadano de honor de París" a manos del alcalde de esta ciudad. No en vano, Angela Davis sabe muy bien lo que es ser preso político.  


Ha recibido muchos homenajes y condecoraciones y es una figura respetada y admirada por las personas progresistas en todo el mundo. Recibió el Premio por los Derechos Humanos del 2004 otorgado por la Sociedad para la Protección de los Derechos Civiles y la Dignidad Humana, con sede en Berlín.


Ha publicado bastantes libros entre los que se incluyen: "If They Come in the Morning: Voices of Resistance" (1971), "Angela Davis: An Autobiography" (1974), "Women, Race and Class" (1981) y "Women, Culture, and Politics" (1989).


Más allá de sus actividades Angela Davis es una de esas personalidades cuyo mito ha trascendido a su propia persona. Para bien o para mal Angela Davis es un icono del siglo XX, la mujer que en los 70 puso de moda el pelo al estilo afro y toda una estética y una actitud rebelde ante la vida. Una mujer a la que todas las mujeres negras querian parecerse, y cuya imagen inconfundible dio origen a una explotación de merchandasing que, como en el caso del Che Guevara o de Malcolm X, sin duda tiene como efecto una trivialización de su mensaje, pero que tambien tuvo como efecto positivo que las reivindicaciones por los derechos civiles llegaran con más fuerza a diferentes sectores sociales, dentro y fuera de los Estados Unidos.  


(1) - El 21 de agosto de 1971 George Jackson fue asesinado en el patio de la prisión de San Quintín. Llevaba una pistola automática 9mm y los oficiales dijeron que trataba de fugarse. Estos hechos son confusos y nunca se han aclarado. George había publicado ese año desde la carcel un libro titulado "Soledad Brother: The Prison Letters".               

Fuente: mujeres-riot.webcindario.com